Ocho años de transición agroecológica en Collserola
El programa Alimentem Collserola inicia ahora un nuevo ciclo con un pacto de municipios —entre ellos, Barcelona— que renuevan su compromiso para seguir transformando el modelo alimentario y agrario de la Sierra.
Con el título “Alimentem Collserola. Transició agroecològica a la Serra de Collserola. Memòria 2016-2024”, el Consorcio del Parque Natural presenta una radiografía del estado del sector agrario local. El objetivo es hacer balance de ocho años de trabajo colaborativo entre administraciones, entidades y campesinado, y orientar el futuro de un entorno agrario singular, activo y, a la vez, vulnerable.
El informe aporta datos detallados sobre la dimensión ecológica, económica y social del sector e incorpora la voz del campesinado sobre los principales retos: el acceso a la tierra, la falta de agua, los daños por fauna salvaje y los obstáculos burocráticos.
Más explotaciones y mayor diversificación
Entre los datos más relevantes, destacan las 24 explotaciones agroganaderas activas en el parque natural, con 58 personas trabajadoras y un total de 35 actividades productivas diferentes. La mitad disponen de certificación ecológica y el 90 % hacen uso de variedades locales o razas autóctonas. También se recogen las 442 actuaciones subvencionadas por el Contrato Agrario de Collserola en tres ediciones, con una inversión de más de 230.000 €.
Por otra parte, la memoria pone en valor la consolidación de servicios estructurales como el programa de asesoramiento Arrela’t, la maquinaria compartida o el propio Contrato Agrario. Además, se han impulsado iniciativas de valor cultural y pedagógico, como la recuperación del tomate Mandó de Collserola o proyectos escolares vinculados a la agroecología.
Un pacto de futuro con la ciudad implicada
La publicación coincide con el inicio del tercer ciclo del programa (2025-2028) y el impulso del Pacto de municipios de Collserola por la agroecología, un acuerdo que renueva el compromiso de las administraciones implicadas.
Barcelona, como uno de los municipios firmantes, reafirma su apoyo a un modelo agrario de proximidad, basado en la sostenibilidad y la colaboración. Esta apuesta se enmarca dentro de la estrategia de ciudad para fortalecer los sistemas alimentarios locales y preservar espacios agroforestales vitales para la biodiversidad y la resiliencia metropolitana.
